Puertas blindadas.

Los tiempos que corren obligan a buscar proteger el ingreso a las viviendas de posibles  intrusos.
La inseguridad se mantiene como una de las preocupaciones mas serias.
No extraña, entonces, que se busque proteger las viviendas. Y para ello se recurre a diversos métodos. Sin embargo cada vez se centra más la atención en la puerta de acceso a la vivienda.
Entre los mecanismos para mejorar la seguridad, reforzar o cambiar la puerta principal de la casa resulta clave.
Los expertos en materia de seguridad aseguran que hay dos opciones para reforzar las puertas: El blindaje agrega una placa de hierro acerado sobre la cara que da al interior del ambiente. Esto se hace para mantener el aspecto exterior original, sobre todo cuando hay algún tipo de reglamentación que obligue a mantener cierta estética o no se quiere alterar el diseño de la fachada. Y el otro es hacer la puerta blindad totalmente nueva. Eso significa armar una estructura en forma de parrilla con hierro acerado, los huecos se rellenan con un material que la aísla acústica y térmicamente. Luego se cubren ambas caras con chapa, madera o se puede reutilizar la parte exterior de puertas antiguas para edificios donde se deba preservar una fachada histórica.


Fuente:
Suplemento Construcción, diario El Plata.
 Febrero 2017.