Cualquier rincón es bueno para
crear un pequeño lavadero.
Una habitación chica independiente suele resultar
muy adecuada y permite soluciones encantadoras. Pero con apenas un pequeño
espacio suele ser suficiente para ubicar el lavarropas y la secadora. En estos
casos es aconsejable utilizar el blanco en las paredes para aumentar
visualmente el lugar. El toque de color lo encontramos en la puerta o en la
ventana, logrando un lavadero moderno
con un poco de ingenio.
El papel pintado es un recurso muy útil para añadir
color a las habitaciones y también a los lavaderos- Pero hay que tener en
cuenta que es una zona húmeda y es necesario preguntar si el papel es apto para
este tipo de ambientes.
Los pasillos anchos pueden aprovecharse con armarios y
estos armarios pueden convertirse en lavaderos improvisados.
El hueco del
armario permite en muchos casos ubicar el lavarropas y la secadora. Algunos
estantes son adecuados a estos fines y puede usarse una puerta corrediza para ocultar los electrodomésticos.
Una alternativa es usar también una cortina en lugar de la puerta.
Tampoco hay
que descartar la idea de ubicar el lavarropas y la secadora por encima del
nivel del piso para acceder a ellos en forma mucho más cómoda. También se los
puede instalar en el baño, colocando el lavarropas en un espacio junto a la
bañera o ducha, aprovechando así las tomas de agua y sin tener que hacer
demasiadas obras.
Fuente:
Suplemento Construcción, diario El Plata.
Septiembre
2017.