#bebe #crianza #niños #nenes #familia #padres #hijos #amor #cariño
La oxitocina es clave en la nivelación entre
los seres humanos y si bajo nivel en las madres con depresión repercute en el recién
nacido. Como el contacto físico aumenta la producción de esta hormona, las
caricias resultan fundamentales.
En los últimos años se realizaron interesantes
investigaciones sobre la oxitocina, una hormona que fabrica el cerebro y que
tiene activa participación para crear fuertes vínculos de afecto con otras
personas, en brindar calma y relajación y en la sexualidad.
Producida en el
cerebro, la oxitocina, a su vez, modifica y estimula las conexiones entre las
neuronas y genera las redes nerviosas vinculadas con el afecto, la confianza
mutua y la falta de hostilidad.
El bajo nivel de oxitocina en la mamá deprimida
repercute en una escasa producción de esta hormona en el recién nacido,
comprometiendo por ambos lados, lo que debería ser un vinculo de una crianza
sincrónica.
El nivel de oxitocina también aumenta de manera natural en el padre
después del parto, lo que facilita que se pueda vincular más y mejor con su
hijo por estar más atento y receptivo a las necesidades del bebe.
El disparador
universal que aumenta la producción de esta hormona es el contacto físico, por
lo que las caricias adquieren así un valor de suma importancia terapéutica.
Fuente:
Revista Viva.
Junio 2014.
Dr Norberto Abdala.