El paso complicado es la compra
de la alfombra. Antes de entrar en cualquier comercio tenemos que saber donde
queremos colocar la nueva adquisición y que uso le vamos a dar. No es lo mismo
una alfombra decorativa en la entrada de la casa que otra que vaya destinada a
la habitación principal.
El primer aspecto al que debemos prestar atención es a
la densidad, es decir, el volumen de las fibras pilosas que forman la alfombra.
El truco es clavar las manos en la alfombra como si fuéramos a estirar fuerte y
con la yema de los dedos comprobar la cantidad de puntadas que hay en la base dejándote llevar por tu buen juicio.
A mayores puntadas, mayor densidad. Es fundamental que la alfombra que se elija
tenga bastante densidad, ya que así se evitara que se formen grietas que
desmontan su encanto visual.
La siguiente cuestión es determinar su preferimos
una alfombra natural o sintética. Las fabricadas con fibras naturales ofrecen
mayores garantías en cuanto a la calidad y al efecto decorativo pero eso se
nota en el precio. En nuestra era, las alfombras sintéticas están a la orden
del día y las nuevas técnicas en cuanto a la fabricación aseguran que no deslucirán
la elegancia de nuestra casa, además de ser bastante más accesibles para el
bolsillo. Se ofrece una gran variedad de materiales como el nailon, el poliéster
o el acrílico.
Este último es el material que más se asemeja a la lana y tiene
como ventaja que es muy resistente a la suciedad y no acumula electricidad estática
como ocurre con el nailon. Además si nuestra alfombra está hecha con acrílico no
corremos el riesgo de que se vea tan desgastada con la luz del sol, cosa
habitual en las fabricadas con nailon o poliéster.
El color es otro detalle que
no podemos pasar por alto, a la hora de elegir una alfombra.
Los colores de
nuestro entorno influyen directamente en nuestro estado de ánimo. Si buscamos
un ambiente tranquilo y relajado en la casa lo mejor es que apostemos por las
tonalidades de azules, verdes y naranjas.
Fuente:
Suplemento Construcción,
diario El Plata.
Mayo 2018.