El recien nacido no
puede sujetar su cabeza, por lo que es necesario mantener siempre un apoyo
debajo de la cabeza del bebe cuando se lo levanta en brazos.
Es bueno que el
bebe mantenga un contacto físico con el cuerpo de los padres, por ello, tener
al bebe apoyando su cabeza contra nuestro cuerpo, es una manera de comunicarle
calor y amor.
Tambien es útil apoyarle en un brazo en flexion o en la palma de
la mano y mantener con el otro brazo, el resto del cuerpo pegado al nuestro y
hacerlo con seguridad y firmeza, sin olvidar muestras de cariño y dulzura.
El
recién nacido permanece tranquilo en su cunita.
Al segundo mes conseguirá
levantar la cabeza.
A los 3 meses puede tener alineada la cabeza con el cuerpo.
A los 6 meses mantiene la cabeza
erguida.
A los 8 meses se mantiene sentada sin ayuda.
Fuente:
Tu hijo,
crecimiento y desarrollo emotivo del bebe, planeta DeAgostini. 1995.