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Lograr un peso adecuado, que nos permita
sentirnos con energía para encarar las obligaciones diarias no implica pasar
hambre. Por el contrario, una dieta balanceada, que contenga los nutrientes
adecuados, mas la combinación de actividad física, es la fórmula que no falla.
Según los cánones actuales ¿Qué implica
estar delgadas? El parámetro es tener poca grasa corporal, que no siempre se
relaciona con estar flacas. Por eso, lo fundamental es, simplemente, comer bien
y realizar algún deporte.
Los kilos de más se eliminan ingiriendo menos calorías
de las que usamos. Pero, para que el resultado sea saludable y duradero, deben
provenir de una dieta adecuada y balanceada, según las necesidades de cada
persona.
En una dieta equilibrada, no deben faltar las proteínas que
constituyen y reparan tejidos (huevos, carnes y lácteos); los hidratos de carbono,
encargados de proveer energía (vegetales, cereales y azúcar) y las grasas,
energizantes y que forman parte de algunas hormonas y enzimas (aceites,
manteca, crema y frutos secos). Comiendo más proteínas y menos sal e hidratos
de carbono, disminuyen la retención de líquidos y los edemas.
Todo lo que
comemos suma calorías, por eso, lo mejor es consumir alimentos magros, de baja
densidad calórica, como por ejemplo vegetales verdes, claras de huevo, lácteos
descremados y carnes sin grasa.
El agua no ayuda a perder peso, pero como el
liquido ocupa lugar en el estomago, da sensación de saciedad.
Si estas pensando
en comenzar alguna actividad física, las que más ayudan a perder peso son
caminatas, correr, nadar, remar o andar en bicicleta.
Antes de comprar algo en el
súper, hay que leer las etiquetas para
tener la información nutricional del producto.
Fuente:
Suplemento Moda y
Belleza, diario El Plata.
Octubre 2015.
Ana Chezzi, licenciada en nutrición.