Los almuerzos de los domingos son
una tradición histórica de las familias argentinas y las pastas suelen ser el
plato principal, y muchas veces comemos con culpa pensando en que nos hace mal.
Sorprendete con estos mitos y verdades:
Las pastas engordan- falso- las pastas
son una mezcla de harina, trigo y agua, por lo cual no contienen grasa.
Esta
lista cuando la tiramos al techo y queda pegada- falso- la idea de arrojar un
fideo al techo o contra los cerámicos de la cocina, a pesar de ser poco
higienica, esta muy difundida pero pocos saben que cuando esto sucede significa
que la pasta se sobre cocino.
Hay que agregarle aceite al agua para que no se
pegue -falso-. El agua y el aceite no se unen y tampoco lo harán durante la cocción.
El aceite no aromatiza el agua ni hace a las pastas mas sabrosas.
Las pastas
aportan energía al cuerpo-verdadero- el mito de que los hidratos de carbono
engordan esta instalado y muchas personas, para bajar de peso, los suprimen de
su dieta. Sin embargo, los hidratos son la principal fuente de energía y
restringirlos puede provocar cansancio, fatiga, irritabilidad y menor
resistencia cuando se realiza alguna actividad física.
La salsa determina a las
pastas -verdadero- se recomienda no usar cremas o carne con grasa.
Cada pasta se debe usar en una preparación diferente -verdadero- las chiquitas (municiones o letritas) quedan bien en sopas, las cintas largas (spagueti o tallarines) con salsas cremosas, la pasta tubular (macarones o mostacholes) con salsa con carnes, ravioles, ñoquis, capeletinis, admiten desde manteca hasta bolognesa.
Cada pasta se debe usar en una preparación diferente -verdadero- las chiquitas (municiones o letritas) quedan bien en sopas, las cintas largas (spagueti o tallarines) con salsas cremosas, la pasta tubular (macarones o mostacholes) con salsa con carnes, ravioles, ñoquis, capeletinis, admiten desde manteca hasta bolognesa.
Fuente: suplemento Vida de diario Hoy. 19 de octubre de 2013