Los conceptos ergonomicos no solo
buscan la comodidad, sino que procuran no resignar la belleza.
En el caso de
las sillas, la curvatura del borde delantero debe ser muy suave para evitar la presión
del muslo y la mala circulación, que posteriormente puede generar varices en
las venas.
Tanto en los sofás como en las sillas es importante que se descansen
los brazos, y que el peso recaiga sobre la base del mueble y no sobre su propia
espalda.
La profundidad del sofá, asi como la de las sillas debe tener una consideración
especial en los muebles ergonómicos, toda vez que esto también es importante
para que la adaptación del cuerpo a ellos sea perfecta.
La altura de los
muebles ergonómicos es también otro aspecto que se tiene en cuenta durante la fabricación
de estos.
No menos importancia se le da al descanso de los pies, los mismos que
en todo momento deben estar apoyados para que la postura natural del cuerpo se
mantenga.
La estética no es resignada por los nuevos muebles que ponen el
acento en la comodidad y el cuidado del cuerpo humano.
Fuente:
suplemento de construccion.
Diario El Plata. julio 2013