Un poco de ejercicio diario
contribuye a mantener nuestro organismo en un perfecto equilibrio, liberándolo de
las tensiones acumuladas durante el dia. La inversión de nuestro tiempo en
realizar ejercicios compensa con creces, pues esta que la actividad física mejora
la memoria, agudiza el ingenio y aviva la capacidad de respuesta y conocimiento
lógico. Hay ejercicios diseñados para proporcionar ese aporte de oxigeno
especialmente necesario para trabajos que exigen un gran esfuerzo intelectual o
una atención prolongada. En primer lugar hay que realizar los ejercicios al
aire libre o con la ventana bien abierta. Hay que movilizar todos los musculos
en cada sesión. No hay que saltar pero si poner los pies en el suelo. No hay
que llegar a un nivel de fatiga. Hay que reponer el agua perdida. Cuando nos
decidimos a poner en marcha una rutina de ejercicios es fundamental estar
dispuestos a tener constancia. Empezamos con un calentamiento, realizando unos
minutos de marcha con el paso pegado al suelo. Con los pies en el suelo al
inspirar colocar las rodillas en el suelo y al espirar, estirar las piernas.
Con los codos y las rodillas en el suelo, elevar y estirar la pierna derecha 50
veces, luego lo mismo con la izquierda. Con las manos ligeramente mas bajas que
los hombros, elevar el tronco sin llegar a extender los brazos. Tumbada boca
abajo, con las palmas orientadas hacia el suelo, ascender los brazos hasta
conseguir que las palmas se unan por encima de la cabeza. Con una combinación de
todos ellos y alternando algunos diferentes días a la semana para no aburrirse,
conseguiremos una buena actividad diaria con tan solo media hora de actividad.
Despues de los ejercicios y para
favorecer la relajación, son muy importantes los estiramientos para trabajar
los musculos de la columna, los hombros, los brazos, los tobillos y los pies.
Consiste en tumbarse en el suelo sobre la espalda, extender los brazos por
encima de la cabeza al mismo tiempo que se estiran las piernas, como si pudiéramos
alcanzar algo con los dedos de ambas extremidades. El programa de ejercicios no
debe tomarse al libre albedrio y tonificar los musculos no debe convertirse en
una carrera contra reloj.
Fuente: Suplemento de Estetica, diario El Dia. 13 de
Noviembre 2013.