Los palacios de cristal con su
estructura de hierro y vidrio, a mediados del siglo 20 anticiparon los actuales
rascacielos y centros comerciales.
En la capital de Mexico, el Palacio de
Bellas Artes, inaugurado en 1934, combina el cristal de su cúpula y la arquitectura
moderna. Por fuera es un edificio art nouveau que parece emular La Opera de
Paris, mientras el interior es de estilo art deco, con referencias a la
arquietectura azteca. En la sala brilla un telon de cristal hecho por Tiffany´s
de Nueva York.
En 1851 el arquitecto Joseph Paxton unió la arquitectura en
hierro y vidrio al crear el Crystal Palace, sede de la exposición Universal
inaugurada en Londres por la reina Victoria.
En 1887 Ricardo Velazquez Bosco
construyo en Madrid el palacio de cristal de los Jardines del Retiro. Es una
catedral de 22 metros de altura, con columnas jónicas de hierro y decoración
griega. En Paris se destaca la cúpula
vidriada de 42 metros de altura del centro comercial Galerias Lafayette.
El
metal y el vidrio ya se combinaban en la arquitectura europea del siglo 19,
pero el revestimiento era clásico.
En Argentina, un ejemplo de esta
arquitectura es el invernadero del Jardin Botanico de la Ciudad Autonoma de
Buenos Aires, importado de Francia en 1898.
Fuente: Suplemento de Viajes,
diario Clarin. Noviembre 2013. El Viajero Ilustrado