La fotocopiadora acaba de cumplir
75 años y pese al tiempo transcurrido y la llegada de nuevas técnicas, su
marcha parece estar todavía lejos de dar el adiós.
Todo comenzó con la empresa
Xerox, que en sus comienzos se llamaba Haloid y fue la encargada de lanzar la
primera fotocopiadora del mundo.
El hacedor de este aparato fue Chester
Carrison (1906-1968), un físico y empresario estadounidense que a fines de
octubre de 1938 logro hacer la primera imagen electrofotográfica. Este
procedimiento hasta ese entonces desconocido, permitia copiar caracteres por la
via electrostática.. Carlson patento su invento bajo el nombre de xerografia,
compuesto por las palabras griegas “xeros” (seco) y graphein (escribir).
El físico
pasaba días enteros en su casa de Seattle haciendo experimentos con azufre y
provocando la indignación de us vecinos, muchos de los cuales quedaban
impregnados de olor en su propiedad. Un dia, Carlson escribió con tinta china
en un porta objetos de vidrio la primera palabra copiada y la coloco en una
placa de cinc cubierta de una capa de azufre. Con un paño, froto la superficie
y genero una carga electrostática. Hoy, pese a los años todas las marcas de
copiadoras utilizan casi el mismo proceso xerográfico, es decir un complejo
sistema de instrumentos que se suceden y complementan de manera precisa y
ordenada hasta lograr en un abrir y cerrar de ojos la duplicación de copias idénticas
de un mismo documento. Hasta ahora sigue siendo la alternativa a la que los
avances tecnológicos no han podido vencer. La creación de Carlson fue celebrada
como el mayor invento desde la fotografía.
Fuente: Investigacion diario El
Plata, octubre 2013