Puede cortar de tajo la roca
maciza, abrirse paso en un cristal a prueba de balas, en una placa gruesa de
acero y hasta en una coraza, asimismo es tan suave, que rebana un pastel con
más precisión que un cuchillo. Supera a las navajas y a las brocas de metal.
Nada menos que el agua!
El secreto que da al agua este impresionante poder es
la fenomenal presión a que se le somete
(en ocasiones hasta 25.000 kilos por pulgada cuadrada).
Esto equivale a mas de
1.000 veces la presión hidráulica normal en una ciudad, suministrada a través
de una boquilla del grueso de un cabello.
La combinación de abrasivos y el
chorro de agua de alta presión crea una potente herramienta capaz de cortar
metales de hasta 7 pulgadas de espesor sin subir la temperatura.
En las minas de
oro de Sudáfrica, algunas herramientas manuales de este tipo parten la roca a
razón de 1 o 2 metros por minuto.
En la industria automovilística, los chorros
de agua de alta presión se aprovechan para seccionar tapetes, tableros de
instrumentos y materiales para asientos. También se cortan baldosas, canceles,
piezas de calzados. También cortan alimentos, como chocolate o pescado
congelado.
Texto de Selecciones del Riders Digest.