Rivadavia, nuestro primer presidente

Bernardino Rivadavia, de tendencia unitaria, asumió un cargo que había sido creado en forma provisoria. 
A el le debemos la primera deuda externa. 
Murió en España, pidiendo no regresar jamás a Buenos Aires. Su petición no fue cumplida.
Mientras Bernardino Rivadavia estaba en el exilio con su mujer y su hijo mas chico, los hijos mayores Benito y Bernardino, se sumaron a  la causa federal y lucharon para que don Juan Manuel de Rosas, asumiera el poder.
El mito del sillon: nos cuenta Vicente Fidel López, en su libro historia de la Republica Argentina, que nuestro primer presidente se lo llevo a su casa porque la había pagado. 
Hasta la casa de gobierno había quedado desmantelada y sin menaje: sus piezas estaban reducidas a paredes desnudas y deterioradas, pues resultaba que todo el  moblaje, hasta el del despacho presidencial traído de Europa, era propiedad de Rivadavia, y que antes de dejar el poder, conociendo la insolvencia del nuevo gabinete para abonarle su valor, había trasladado toda a su nueva habitación.

Fuente: Felipe Pigna.